Oaxaca, Oax.- Murales colectivos elaborados por infantes y jóvenes que cuentan sobre su territorio y vida comunitaria, dentro de una cartografía corporal, es parte de la exposición titulada De cómo una cochinilla pintó el mundo de colores… donde participan niñas y niños mixes, zapotecos, mixtecos y nahuas de Oaxaca y Morelos. Esta exposición  se inaugurará este 23 de febrero en el Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca (MACO).

Esta serie de lienzos pintados con grana cochinilla mexicana (Dactylopius coccus), y cuyos autores van de los 7 a los 17 años de edad, son originarios de las comunidades de San Isidro Aloapám (Sierra), Santo Domingo Yanhuitlán (Mixteca) y Tlacolula de Matamoros (Valles Centrales) en el estado de Oaxaca. Y de Ocuituco y Metepec del estado de Morelos.

Este mismo día se presentará el catálogo de las obras murales, y que son el resultado de una serie de talleres
impartidos por Dulce Trejo Maldonado, Miriam Aguilar Romero, y Clara Sánchez Hernández, esta última coordinadora y titular del proyecto financiado por el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca) en el Programa de Fomento a Proyectos y Coinversiones Culturales, Emisión 34-2018, que se propuso atender la disciplina de las artes visuales.

Esta colección enfoca el trabajo y la técnica de la grana cochinilla en tamaño de gran formato tipo mural sobre tela, con temáticas comunitarias que nos cuentan las niñas y los niños sobre su territorio y vida comunitaria, dentro de una cartografía corporal.

De acuerdo con Clara Sánchez,  este proyecto contrae una carga de significados, empezando por la facilitación del conocimiento del insecto a las niñas, niños y jóvenes que con curiosidad y entusiasmo se sumaron a los talleres para conocer fragmentos breves de la historia de la grana cochinilla desde la llegada de los españoles, contada como la otra parte de la historia, la del despojo y saqueo de las riquezas.

Así, de abril a agosto de 2019, se impartieron tres talleres a las niñas, niños y jóvenes participantes en el proyecto: “Cuerpo y entorno comunitario”, que tuvo como objetivo la estimulación del juego y el desarrollo de las capacidades creadoras, facilitado por Dulce Trejo; “Grana”, implementado por Clara Sánchez para el fomento de la grana cochinilla y la realización de murales colectivos pintados con el pigmento del parásito; y, finalmente, un taller impartido por Miriam Aguilar para sistematizar la experiencia por medio de una animación visual colectiva.

Los talleres se impartieron con una metodología lúdica. En primer término, se abordó el conocimiento del cuerpo y qué es habitar el territorio, para después hablar de la comunidad, reconocer la identidad. Se les estimuló para la realización de dibujos de gran formato de manera colectiva, que muestran las posibles cartografías corporales y el entorno comunitario pintado con el tinte-pigmento natural emblemático e histórico de Oaxaca. El resultado es que los participantes cuentan la experiencia vivida por medio de una animación visual.

Con el proyecto se atendió a más de 400 niñas, niños y jóvenes de localidades mixes, zapotecas, mixtecas y nahuas, al fomentar el conocimiento de la grana cochinilla y el desarrollo de las capacidades creadoras, así como fortalecer los valores comunitarios.

El 23 de febrero a partir del medio día se darán cita en el MACO muchos de los participantes en el proyecto para compartir sus experiencias vivenciales en los talleres recibidos, ofrecer su lectura y comentar sobre los textos que acompañan a muchos de los lienzos, ambos contenidos en el catálogo.

En el acompañamiento y presentación del catálogo estarán el Antropólogo Telmo Jiménez Díaz y la Antropóloga Raquel Diego Díaz, originarios de la sierra mixe. Así mismo el Profesor Luis Hernando Matus, istmeño zapoteco, docente de nivel telesecundaria compartirá desde su punto de vista, la importancia de fomentar la grana cochinilla a los estudiantes, e invitar a los docentes a conocer más sobre insecto de tinte nocheztli.

También estarán los autores de los textos que se forjaron en el catálogo Grana, De cómo una cochinilla pintó el mundo de colores…