Arte PopularArtes EscénicasArtes VisualesCaminos del ArteDía a Día

“La época de los Chamanes no fue una etapa oscura, sino de resistencia”: Hugo Tovar

Los maestros Carlomagno Pedro, Nicéforo Urbieta y Hugo Tovar contrastaron sus puntos de vista y hablaron de sus experiencias propias en el taller

Por: José Luis PÉREZ CRUZ / Mala ALVARADO

Oaxaca de Juárez, Oax.- “A la época de los Chamanes se le ha considerado como una etapa oscura; si acaso hay oscuridad será porque hay muy pocos datos y poca gente conoce lo que sucedió  en ese momento”, afirmó el artista plástico Hugo Tovar durante su participación en la segunda edición del conversatorio Memorias del Tamayo.

El maestro Carlomagno Pedro expresó su gusto por el foro que se generó a través de este conversatorio. Foto: Mala Alvarado.

Como cada último jueves de mes, se dieron cita en el Taller de Artes Plásticas Rufino Tamayo integrantes y exintegrantes del mismo, contando en esta ocasión con la presencia de los maestros Carlomagno Pedro, Nicéforo Urbieta y el referido Hugo Tovar.

El tema con el que se abrió está mesa fue: «Origen del Taller Tamayo y Etapa Oscura (Chamanes)”, por lo que las opiniones fueron divididas entre los participantes. El maestro Tovar, nombrado como el último integrante de los chamanes, explicó que éste fue un grupo de jóvenes artistas que estuvieron en el Taller Tamayo durante una etapa en la que no hubo un director oficial.

“Cuando yo llegué al Tamayo nada más estaba Gonzalo Carreño, Josué Lázaro, Ángel Luis Rodríguez, Erasto García, Ana Vázquez y Andriacci que era ayudante de Gonzalo. Vivíamos entonces en un anarquismo puro”, expresó el artista.

Así, ante distintos sucesos y percances, después de mandarles permanentemente a una oficial de policía para vigilarlos, se los cerraron por un altercado con ella. Tras la presión de este grupo se reaperturó con la condición de poner al maestro Juan Alcázar como director. Es esto lo que ante los ojos de muchos, quedó marcado como la mencionada etapa oscura del Tamayo.

Por su parte, el maestro Nicéforo Urbieta, quien vivió el momento en el que el Tamayo se abrió oficialmente al separarse de la Escuela de Bellas Artes, puntualizó su postura negativa sobre el arte que, según él, enseñaban en aquel momento.

A su juicio, en el Tamayo se aprendía un realismo mágico oaxaqueño siguiendo una iconografía establecida por ciertos artistas del momento: “imagínense a chavitos de catorce o quince años diciéndoles que esto es arte moderno… ¿pues qué les queda si no hacer ese tipo de arte?”, expresó el artista.

El maestro Nicéforo Urbieta puntualizó su postura negativa sobre el arte que, según él, enseñaban en el inicio del Tamayo. Foto: Mala Alvarado.

Por esta razón, en aquellos momentos Nicéforo Urbieta rechazó la invitación de Roberto Donís, uno de los artistas fundadores, para integrarse al taller. En cambió su postura se oponía a la mercantilización y se dirigía más hacia temas de protesta teniendo como referencia los acontecimientos del 68 y el 71 en México.

Ya en la intervención del maestro Carlomagno Pedro que formó parte del Tamayo en sus primeros años de vida, rechazó que a los integrantes del taller se les impusiera una manera de hacer su obra.

Afirmó que “el Tamayo nos sirvió en su momento para motivarnos y ser de mente abierta. Yo recuerdo que veía trabajos como el de Maximino Javier y encontraba ciertas coincidencias con mi trabajo porque usábamos la iconografía perteneciente a la idiosincrasia que tenemos los que formamos parte de las naciones indígenas”.

Más adelante reafirmando su postura, el maestro Carlomagno contó que incluso Roberto Donís que dirigía el Tamayo, le decía que él no pintaba enfrente de los estudiantes porque “con eso creas una escuela, ya que después todos inconscientemente empiezan a repetir lo que tú haces”.

Memorias del Tamayo es una actividad rumbo a los 50 años del Taller Tamayo en el 2024. Foto: Mala Alvarado.

Ahora bien, ya en la última etapa del conversatorio, Carlomagno Pedro expresó su gusto por el foro que se generó a través de este conversatorio que es apenas una de las primeras actividades rumbo a los 50 años del Taller Tamayo en el 2024.

“A lo mejor no coincido con muchas cosas pero esta es una convergencia de ideas y todos tenemos el derecho a expresarnos”, afirmó el maestro, agregando por último que: “quienes van adelante con este taller los felicito porque están haciendo el esfuerzo de mantener ese espíritu”.

Por su parte, el maestro Hugo Tovar propuso el “organizarse para que se les pague bien a los profesores y rescatar la libertad que el Taller Tamayo tenía”.

Asimismo, argumentó que “después de Juan Alcázar vinieron directores que fueron una continuación oficialista haciendo caer al taller. Hay que rescatar la dignidad del Tamayo alejándose un poco del oficialismo”. Espacio que, sin embargo, ha sido dependiente de la Secretaria de las Culturas y Artes de Oaxaca.

 

Previous post

Convocan a músicos para integrarse a Centro de Experimentación y Producción de Música

Next post

El Museo de Arte Moderno Ofrecerá recorrido en Lengua de Señas Mexicana

Staff Santa Cultura

Staff Santa Cultura